Baja de certificación PBIP de Mar del Plata provoca dificultades, posible escenario para resolver antiguos problemas

La Certificación del Código Internacional PBIP (Protección de Buques de Buques e Instalaciones Portuarias), en el marco de la Organización Marítima Internacional, y administrado en el país, como órgano de aplicación por la Prefectura Naval Argentina, establece un marco internacional en el ámbito marítimo, de cooperación para detectar amenazas y adoptar medidas preventivas, para evitar el narcotráfico, el terrorismo, la trata de personas, la seguridad de instalaciones, equipos, y personas.

Ya semanas atrás la Prefectura, debido a inspecciones regulares y extraordinaria, y avisos de actores portuarios, corrobora y oficializa varias inconvenientes relativos a la protección portuaria, que en parte son inherentes a la histórica estructura y quehacer portuario, pero que deben ser adaptados con firmes procesos, obras, auditorías y tecnología.

Posteriormente, luego de varias comunicaciones para reestablecer el estado de seguridad y protección portuaria, el pasado sábado, la Prefectura, le comunicó al Consorcio Regional Portuario Mar del Plata, la pérdida de habilitación PBIP del Puerto, en base la normativa nacional e internacional del convenio, leyes y ordenanzas de Prefectura.

Los incidentes manifestados están implicados con ciertas falencias en el sistema de barreras de ingreso al área restringida, el sistema de tarjetas que habilitan el ingreso del personal como así también los vehículos autorizados, alambrados perimetrales con cierta altura y anti-escalamiento, funcionamiento de las alarmas, sistema de cámaras, manejo y control de residuos, iluminación nocturna de la instalación portuaria y el espejo de agua.

Consultado por PESCARE, el presidente del Consorcio Portuario Regional de Mar del Plata, Martín Merlini, aclaró que momentáneamente la estación marítima perdió la vigencia del plan que establece la normativa internacional, aunque relativizó su impacto. ’El estatus de puerto seguro no se pierde en términos de estructura portuaria, se mantiene. Operativamente no hemos tenido restricciones’, subrayó. Como ejemplo, citó que el lunes ingresó el buque portacontenedores ’Ronit’, unidad al servicio de la naviera MSC.

’La fuerza (Prefectura) es la que establece las capacidades o incapacidades de los puertos. Nosotros respetamos eso y seguiremos trabajando en forma conjunta, pero en este caso Prefectura evaluó, a mí juicio de manera apresurada, la aplicación de una sanción en términos de quitar de categoría o no sostener el plan de vigencia’, evaluó Merlini.

En diálogo con la Radio local FM 96.3, Emilio Bustamante, de la Terminal de Contenedores 2 aclaró que la actividad no se ha paralizado pero reconoció que este tipo de noticias ’no son bien recibidas por las navieras y aquellos que se interesan en operar por nuestro puerto’. Aunque planteó no haber tomado contacto con el informe de Prefectura, Bustamante sostuvo que ’lo ideal es que no se llegue a esta instancia’.

Fuentes consultadas de la actividad pesquera prefirieron no manifestarse publicamente por el tema.

Por otro lado, para referencia, el Puerto de Mar del Plata tiene su propia OPR (Organización de Protección Reconocida) avalada por la Prefectura, para el control y gestión de la seguridad y todo lo implicado en el Código Internacional PBIP, situación que muy rara vez se da en los puertos, lo cual tiene sus ventajas y también complicaciones, para generar un ambiente de protección, respaldo, firmeza y autonomía.

Parte de las consecuencias que se podrían dar por la baja o suspensión de la Certificación PBIP, son que el capitán del buque y la naviera, coordinen un esquema de seguridad especial y adicional con el Puerto, que incluyan más vigiladores y rondas, guardia en el espejo de agua, que el contenedor cargado en el Puerto tenga más controles en el puerto de destino, etc., que significan en definitiva más tiempo y dinero.

La globalización exige a los países en desarrollo colocarse a la altura de los estándares internacionales incluyendo la cuestión seguridad, aspecto que no debería ser una variable de ajuste. La seguridad se ha constituido en un factor decisorio para la continuidad del comercio exterior, afectado a las personas que operan a bordo en la interfaz buque-puerto. La adopción de los recaudos de seguridad contemplados en éstas medidas marca la diferencia entre los que pueden pertenecer, o no al mundo del comercio internacional naviero.

Luego más de una década de certificación como Puerto Seguro en la Prefectura y la OMI, paradójicamente este incidente puede servir, si se toma debida nota y se hacen las cosas que hay que hacer, como un fuerte empuje para ordenar varios aspectos estructurales e históricos del Puerto en los últimos años, con la participación y compromiso de todos los actores, públicos y privados, de un Puerto y un Consorcio tan complejo e importante como Mar del Plata.