Expulsados los yihadistas de Marawi

’Señoras y señores, por la presente declaro que la ciudad de Marawi ha sido liberada de la influencia terrorista, lo que marca el inicio de la rehabilitación’, señaló Rodrigo Duterte, presidente de Filipinas, el pasado 17 de octubre, no obstante aún queda pendiente combatir a algunos reductos de resistencia del grupo Maute, afiliado a la organización terroristas Estado Islámico (EI).

Liberan a Marawi

El anuncio se produjo después de que el Ejército de Filipinas, abatiera en una operación planeada, a dos de los principales cabecillas del grupo terroristas, Isnilon Hapilon y Omar Maute. Hapilon, era considerado por el EI como emir, del sureste asiático.

La ciudad de Marawi, capital de la provincia Lanao del Sur en la región autónoma de Mindanao, fue atacada por el grupo Maute que tomó control de parte de la ciudad, además incendió la Catedral de Santa María y privó de su libertad al sacerdote Teresito ’Chito’ Suganob’, juntos a varios fieles. Hace pocas semanas el Padre Suganob, fue puesto en libertad. Por otro lado, al entablarse los combates entre las fuerzas regulares de Filipinas y los rebeldes, varias centenas de civiles quedaron atrapados por el fuego cruzado entre ambos bandos, por lo que se permitió la creación de un corredor para su salida.

En el mes de septiembre se anunció que Abdullá Maute, hermano de Omar Maute, había fallecido, lo que representaba una baja importante en la formación terrorista, y la lucha de las autoridades por la ciudad nunca cejó.

De esta manera los tres principales líderes de los terroristas que atacaron Marawi, ya han perdido la vida, aunque aún existen reductos de resistencia yihadista; en un primer momento al declarar a la ciudad liberada, se calculaba que habría menos de 30 milicianos aún escondidos, se consideró poco después por las autoridades, como una cifra baja.

Lo anterior se corroboró, ya que en combates entablados el miércoles y en las primeras horas del jueves, 18 y 19 de octubre respectivamente, habrían sido abatidos 20 combatientes rebeldes, y según informan quienes habían sido rehenes de los terroristas, habría al menos otros 20 yihadistas más.

Por su parte, Restituto Padilla, vocero del Ejército, informó que uno de terroristas fallecidos en estos últimos combates sería, Mamohud Amhad, a quien se le considera como el tesorero del Estado Islámico en el Sureste Asiático y reclutador de combatientes extranjeros para Marawi. Padilla cree que las fuerzas armadas filipinas pueden alcanzar una victoria definitiva ’entre hoy y mañana.’

Con información de El Comercio, El Español y EFE



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