Liberan a el ’Canario’ tortillero que por venganza mato a otro en Ecatepec

Ecatepec, Mex.- "Ese fulano mató a mi hermano e intentó matarnos a mi hermana y a mí, ahí mismo, ese día. De milagro se le encasquilló la pistola. Cuando nos dieron la noticia de que ya está libre, lo que sentimos fue temor", dijo Héctor Hernández, refiriéndose a José Rubén "N", alias "El Canario", quien salió en libertad el mes pasado, tras haber estado solo 6 años en reclusión por el delito de homicidio calificado.
Todo indica que el crimen contra Alfonso Hernández Verá, fue por el negocio de tortillerías, pues los presuntos asesinos forman parte de una familia dedicados al negocio de la masa y la tortilla.
Los hechos ocurrieron durante el 8 de octubre de 2015, en calles de la colonia Ciudad Cuauhtémoc. La víctima de nombre Alfonso Hernández Valera, de 32 años de edad, se encontraba en compañía de sus hermanos afuera de una tortillería que él administraba, ubicada sobre calle Andalucía, con razón social "Xóchitl", cuando el homicida llegó a bordo de una camioneta, acompañado de su hija y de su yerno, a encararlos. Los tres iban armados.
"Te voy a matar hijo de tu puta madre", le dijo Miguel Ángel, esposo de Alicia, hija de "El Canario", al finado, antes de que los tres descendieran del vehículo. Rubén, de 66 años de edad, quien también tenía tortillerías, se dirigió hacia Alfonso y le disparó en dos ocasiones, logrando herirlo en la pierna y luego en el abdomen, a la altura del costado derecho. Este se desvaneció y las amenazas continuaron.
"Le digo: ya cálmate, le acabas de disparar a mi hermano. Me apunta a mí al pecho y hace por disparar, pero se le encasquilló la pistola. Voy a acercarme hacia él para detenerlo y su hija me apunta con su pistola y me grita: ¿Tú también, hijo de tu puta madre, te quieres morir?, le digo: Ya estuvo, me dispara, pero no me da. Se treparon a la camioneta y antes de irse amenazaron también a mi hermana", comentó Héctor, quien de inmediato subió a su hermano a bordo de un vehículo particular, buscando ayuda.
En el camino encontraron una ambulancia, cerca de Santa María Chiconautla. El paramédico aceptó ayudar y atendió el sangrado en la pierna de Alfonso, pero al subirlo a la unidad, se percató de una segunda herida en el abdomen. Lo llevaron a la Clínica 68 del IMSS, ubicada sobre la carretera federal México-Pachuca. Los daños internos habían causado estragos irreversibles y ahí murió. Su esposa y sus dos hijos quedaron desamparados.