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Junio 21, 2016 09:03 hrs.
Octavio Raziel García › diarioalmomento.com
Periodismo ›
Los tristes acontecimientos de Nochixtlán, Oaxaca, me hicieron recordar cuando varios reporteros del diario donde trabajaba fuimos comisionados a cubrir la información de los disturbios del ’68. Las notas eran entregadas al jefe de redacción que a su vez las llevaba al director general para su evaluación y posible publicación. En ocasiones, el director general enviaba por alguno de nosotros. Me tocó dos o tres veces estar frente a él. –Muy bien compañero, me dijo y pidió mayor información sobre la nota que llevé. Luego tomó mis hojas y las puso sobre un legajo de más cuartillas. En el centro de su escritorio estaba un sobre color manila que recién había traído un motociclista desde el Palacio de Cobián y la nota que se publicaría al día siguiente en primera plana.
Como es mi costumbre, no veo noticiarios, pero me imagino que a las jefaturas de redacción del duopolio televisivo no les llegará la línea oficial en un sobre color manila sino el guion vía internet.
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