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Marzo 31, 2014 11:27 hrs.

Ángel Soriano › diarioalmomento.com

Política ›


Con 70% de los consejeros nacionales a su favor, y con su asistencia a la XXII Asamblea Nacional, el coahuilense Gustavo Madero Muñoz se afianza para continuar en la dirigencia nacional del PAN, no sólo por el apoyo de sus correligionarios, sino por la simpatía que se ha granjeado en el medio oficial a través de la incondicionalidad de sus coordinadores parlamentarios en el Senado y en la Cámara de Diputados.
Y si a esto se suman las pifias de su principal opositor, el senador Ernesto Cordero, quien como aspirante a la candidatura presidencial del PAN confundió los nombres de los ex presidentes de México salidos de sus filas, Vicente Fox a quien llamó Vicente Calderón y a Felipe Calderón como Felipe Fox, añadiéndose ahora su nuevo transpíe de decir que desea ser presidente del PRI, le resta partidarios puesto que no es capaz de retener nombres de personas ni de instituciones.
Más si con ingenuidad aceptó el pacto con la lideresa nacional interina, Cecilia Romero, de no acudir a la asamblea nacional panista en calidad de candidato a la presidencia del CEN, cuando su adversario Gustavo Madero “no lo hizo como candidato, sino como consejero”, llevándose las palmas de sus partidarios y de la militancia por su simple presencia.
Por todo ello, y con el control que sobre el PAN tiene Madero, se da ya como un hecho que el ex senador por Chihuahua sea ratificado como presidente del ex partido opositor para complementar el proyecto reformador de la actual administración, que requiere de los apoyos de los partidos opositores y con cuyos dirigentes se ha entendido bien, pues el compartir el poder no le hace daño a los ex aguerridos opositores.
TURBULENCIAS
Caldeada situación política en Oaxaca
Pese a que se afirma lo contrario, no está confirmada la visita mañana del presidente Enrique Peña Nieto a Tututepec, en la sierra sur oaxaqueña, principal bastión del director de Liconsa, Héctor Pablo Ramírez Puga Leyva, donde inauguraría un centro de acopio de leche en beneficio de los productores de la región; adversarios del funcionario amenazaron con boicotear el evento al acusar al funcionario de comprar espacios en los medios impresos y electrónicos de la entidad para promoverse políticamente en detrimento de los recursos destinados a los pobres a través de los programas sociales. El líder nacional del PRI, César Camacho, hizo lo propio el viernes pasado al cancelar su visita a Oaxaca de última hora por las airadas protestas de los maestros en rechazo al tricolor que “renovó” dirigente con Anuar Mafud, lo cual da idea de la violencia preelectoral que se vive en el estado, donde grupos de poder político y económico se disputan, a sangre y fuego, la gubernatura del estado, a casi dos años de los comicios. El ex gobernador José Murat controla a los delegados federales y planea el arribo de su hijo, el director del Infonavit, Alejandro Murat, mediante alianzas locales y el control del PRI estatal con su ex compañero de banca en la primaria, Héctor Anuar Mafud, en tanto el ex gobernador Ulises Ruiz empuja ax su ex jefe de prensa, Héctor Pablo Ramírez Puga, y el actual grupo en el poder promueve al máximo dirigente de la cúpula empresarial del país, Gerardo Gutiérrez Candiani. Los oaxaqueños lamentan este enredo pues alejan al estado de los beneficios de la Federación y este panorama deja claro que ninguno los dos “punteros” garantiza la gobernabilidad del estado, al contrario, prolongaría la ingobernabilidad...
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