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Abril 09, 2014 11:34 hrs.

Elvia Andrade Barajas* › diarioalmomento.com

Cultura ›


Por ELVIA ANDRADE BARAJAS
Exclusivo para RM
www.reportajesmetropolitanos.com.mx
--Primera parte --

MALINALCO, ESTADO DE MEXICO, 23 de enero de 2014.- La naturaleza y la historia tuvieron un hijo, al que llamaron Malinalco, que identifican como “la puerta al trópico de México” por su clima caluroso, exuberante vegetación entre montañas, colinas y cumbres, de las que brotan ríos y manantiales, con extensos campos verdes, cubiertos, en el día, por un hermoso y envidiable cielo despejado, y por las noches, por un manto de estrellas, muy apreciado por astrónomos de todo el mundo, que acampan aquí para estudiarlas.

La cercanía de Malinalco con la Ciudad de la Eterna Primavera, Cuernavaca, Morelos, y con Chalma, donde se venera al milagroso Cristo Negro o Señor de Chalma, así como su pasado prehispánico y colonial, que se siente en sus calles empedradas, sus capillas de barrio y sus pequeños hoteles sui generis, han hecho de este lugar un Pueblo Mágico y con Encanto, a donde han emigrado muchos famosos, desde escritores, artistas y políticos, que han construido hermosas residencias campestres.

“Los amaneceres aquí son un regalo de Dios, lo mismo que las tormentas eléctricas, en las borrascas y la lluvia de estrellas en los días de calma”, afirma Margarita J. Linares al agregar:

“Aquí las estrellas se ven como en ningún otro lugar; es mágico. Lugar ideal para astrónomos que estudian las estrellas, pero la gente común, como yo, sentimos que tocamos el cielo con las manos. Con el alma.

“Disfrutas la libertad. Tu libertad en contacto con la naturaleza. Todos tus sentidos se agudizan al máximo, especialmente si practicas rapel, tirolesa, parapente o estudias el comportamiento de las estrellas”, dice Margarita, una ingeniera en Alimentos.

Explica que desde hace años viene con un grupo de jóvenes a acampar en Malinalco, para practicar escalada en rapel, tirolesa, cabalgatas, parapente y vuelo en globo aerostático.

“Soy cazadora del viento”, afirma Margarita al referir que “mi pasión es el deporte extremo en las alturas, pero cuando descendemos de las montañas nos conquista todo lo que vamos encontrando al bajar: vegetación por doquier, ojos de agua y cascadas que nacen entre las rocas, flores exóticas, únicas, grandes, de colores muy llamativos”.

“Parece el cielo, pero puede convertirse en el infierno”…

Sin embargo, Simone Dagar, un extranjero que también práctica deportes extremos, sostiene que “así como Malinalco parece el cielo, puede convertirse en un infierno si te encuentras con una serpiente coralillo o con la araña viuda negra, que son especialmente venenosas; pero también te puedes considerar muy afortunado si te topas con un armadillo o con un jaguar”.

El olor a pan recién hecho, a tortillas de comal y a elotes tiernos es un imán que atraen a los coloridos mercados de Malinalco, donde la diversidad vegetal es muy basta.

Casi en todas las casas hay huertos familiares, en los que es común ver zapotes blancos, guayabos y ciruelos creciendo al lado de helechos, jacarandas y nopales.

También se aprecia el cultivo y nacimiento de la exquisita y bella orquídea, que contrasta con la peligrosidad de animales salvajes del bosque, como las serpientes coralillo, de cascabel (en 27 especies) y el cantil; así como innumerables arañas, siendo la más peligrosa la “viuda negra” y las 12 especies de alacrán que viven en las cumbres y montañas.

Entre los pobladores se habla de que en las cuevas más altas se encuentran el vinagrillo o nana del alacrán, la salamanquesca una bella lagartija con cola azul y las mariposas nocturnas, altamente venenosas, alrededor de las cuales hay muchos mitos.

Malinalco es uno de los municipios con mayor biodiversidad en el Estado de México, su selva baja caducifolia, sus bosques de pino y bosques de galerías dan cabida a una enorme variedad de flora y fauna.

Aquí habitan mamíferos como cacomixtles, armadillos, zorros, coyotes, ardillas y venados, incluso algunos estudios realizados por investigadores de la Universidad Autònoma del Estado de Mèxico (UAEMEX) afirman que en algunos sitios todavía pueden vivir jaguares; rodeados de hongos, algunos comestibles, otros tóxicos e incluso alucinógenos y miles de plantas sobre muchas de las cuales se han desarrollado usos tradicionales como medicina, alimentos, curtidores de piel y jabón, entre otros.

En el Museo vivo "Los Bichos de Malinalco" y el campamento tortuguero Mali-Xanat se exhiben la mayoría de esos insectos, peces, tortugas, plantas, serpientes, tarántulas y hongos, que a diario son sometidos a nuevas investigaciones.

Cultivo de rosas y turismo, principal actividad económica

Malinalco se encuentra al sur del Estado de México, a 65 kilómetros de Toluca, la capital del Estado de México, y a 59 de Cuernavaca.
Tiene una superficie territorial de 231.7862 km2 y cerca de 23 mil habitantes, por lo que la densidad poblacional es de 121 habitantes por kilómetro cuadrado.

Sus actividades económicas predominantes son forestal y agrícola (88.42%).

Aquí se siembran 35 tipos de cultivo diferentes, de los cuales la floricultura, en especial el cultivo de rosas, ha desplazado los productos alimenticios tradicionales.

Las rosas, nardos y gladiolas representan el 42.68% del total de producción, en tanto que el maíz, chícharo, mamey, tomate verde, aguacate y caña de azúcar cuentan por 42.59%, dejando el resto a plantas forrajeras y otras legumbres y frutas.

La ganadería es una actividad con presencia regular en Malinalco, se concentra principalmente en producción de ganado bovino y gallinas, aunque también se producen otros derivados como leche, huevos y miel.

El comercio, restaurantes y hoteles son otra actividad de importancia en el municipio, principalmente en la cabecera municipal, por la atracción turística de su zona arqueológica, su cultura y tradiciones que casi todos los fines de semana los pones de manteles largos, para celebrar una fiesta.

PUEBLO MÁGICO DE CALLES EMPEDRADAS...

MALINALCO, ESTADO DE MEXICO, 02 de febrero de 2014.- Al pie de las montañas nace este pueblo mágico ancestral, de calles empedradas, antiguas historias y casas multicolores hechas, algunas, de adobe. Otras, casonas coloniales entre 10 pequeños templos de los siglos XVI, XVII y XVIII.

En el cerro de Los Idolos se levanta Cuauhtinchán, majestuosa zona arqueológica de Malinalco, una de las más bellas del Estado de México, afirma Marí­a Fernanda Castro, guí­a de turistas en Malinalco y Chalma.

Cuauhtinchán fue descubierta en 1933. Su templo principal, Cuauhcalli, es uno de los más famosos en el mundo por su carácter monolí­tico, al ser tallado en la roca del cerro de Los Idolos, con un gran espacio redondo en la cúspide, donde se reuní­an las órdenes de los Guerreros Águila y Jaguar para presenciar el sacrificio de un guerrero prisionero, el cual se convertirá en el mensajero del sol.

La entrada de este espacio está¡ esculpida en forma de una cabeza de serpiente que representa al inframundo.

Al interior del templo se encuentran impresionantes esculturas de dos águilas y un jaguar extendido tallados en la misma roca.

Tras una de las águilas está un cuauhxicalli o vaso sagrado donde se colocaban los corazones de los sacrificados.

La orientación del templo Cuauhcalli es el resultado de cálculos astronómicos precisos donde pueden apreciarse impresionantes fenómenos de luz, que acrecientan la magia de Malinalco.

Desde allí­ se aprecia una magní­fica panorámica del pueblo, orgulloso del Santuario de los Guerreros Águila y Jaguar, que por su carácter monolí­tico ha sido comparado con Ellora en la India y con el templo de Abu Simbel en Egipto.

En este pintoresco pueblo la mayorí­a de sus restaurantes y hoteles boutique son pequeños.

Recorrer sus calles, visitar los museos, comer truchas frescas y nieves de todos sabores, son algunos de los aspectos que hacen mágico este tranquilo y silencioso lugar, ideal para acabar con el estres, meditar y aprovechar al máximo los beneficios desintoxicantes del temascal.

No obstante, en Malinalco casi cada fin de semana hay una fiesta.

La gente nativa es muy alegre. Gustan del baile, quemar castillos, participar en procesiones religiosas en las capillas o en el ex convento Agustino o en las diferentes capillas, acompañados de los bailes de "Los Chinelos", mujeres ataviadas con trajes multicolores que danzan en honor al santo festejado, iniciando las festividades el 2 de febrero, Dí­a de la Candelaria, en la capilla de Santa Marí­a.

Las otras fiestas patronales son:

La de San Guillermo, en la Capilla de San Guillermo, el 10 de Febrero; en la Capilla de Santa Mónica , se celebra a la Santa patrona del mismo nombre el 4 de Mayo; San Juan se festeja en Capilla de San Juan el 24 de Junio; San Pedro, en la Capilla de San Pedro el 29 de junio.
La celebración más importante es la Del Divino Salvador en el Ex convento agustino, el 6 de Agosto.

San Martí­n se festeja en la Capilla de San Martí­n, el 11 de noviembre; San Andrés en la Capilla de San Andrés el 30 de noviembre.

Malinalco es un buen sitio para observaciones de astronomí­a, por su altitud, 1800 metros sobre el nivel del mar, con amplias zonas oscuras a sus alrededores, clima seco y viento tranquilo durante la mitad del año.

En Mali Xanat campamento tortuguero, muy cerca de la cabecera municipal, pero alejado de la luz artificial, los aficionados o profesionales de la astronomí­a, pueden contar con un piso de pasto para colocar su telescopio, mesitas con bancas para sentarse o colocar accesorios, zona de fogata, lugar para colocar tiendas de campaña, y seguridad bajo un hermoso cielo estrellado.

Entre sus atractivos turí­sticos están, además de la zona arqueológica Cuauhtinchán.

Otros de sus atractivos son el centro del poblado el Convento Agustino del siglo XVI, de construcción medieval, alberga frescos originales en techos y muros de los pasillos.

Fue edificado en 1543 por la orden agustina que le dio el nombre de "Templo del Divino Salvador de Malinalco", cuyo enorme atrio esta destinado al catecismo y misas al aire libre.

Otros imanes turí­sticos son el Museo Universitario Doctor Luis Mario Schneider, humanista argentino atrapado por el encanto de este municipio.
Aquí­ se exhiben piezas y herbolaria prehispánicas de la zona, la Casa de la Cultura, el criadero de truchas El Molino.

En el Centro revive la vida prehispánica

Sus calles empedradas, huertos frutales y casas coloniales se aprecian de forma diferente los miércoles de tiangüis, porque los vendedores reviven la vida prehispánica, con sus artesaní­as, utensilios de barro, artí­culos de cuero, objetos de piedra y madera tallada.

Los olores y colores se mezclan y confunden entre el tianguis y los restaurantes, que ofrecen platillos tí­picos, destacando la trucha al estilo Malinalco, famosa en la región, lo mismo que las nieves de limón, zapote, mamey o guanábana o el púlque casero, que es toda una tradición en Malinalco.

Esto y mucho más contribuyó a que Malinalco fuera nombrado Pueblo Mágico y con Encanto, que estará de manteles largos del 3 al 6 de abril de 2014 en el Primer Festival Cultural de Malinalco, en el que se realizarán más de 30 eventos de música, teatro, circo, danza, pintura, escultura, fotografí­a y gastronomí­a gratuitos en los templos, el zócalo, parques y bibliotecas de la localidad.

* Directora general de Reportajes Metropolitanos
eab_elya@yahoo.com.mx

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Malinalco, regalo de Dios

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