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Octubre 14, 2018 23:00 hrs.

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Chilapa, Gro., octubre 14 de 2018 (IRZA).- Indígenas, campesinos, activistas de derechos humanos, militantes de izquierda y familiares marcharon este domingo desde esta cabecera municipal a la localidad de Nejapa, para exigir justicia por el asesinato de Ranferi Hernández Acevedo y tres personas más, y aseveraron que la Fiscalía General del Estado (FGE) ha sido ’omisa y cómplice’ en la investigación de este caso.

Unas 500 personas conmemoraron así el primer aniversario del asesinato de Ranferi Hernández Acevedo, su esposa Lucía Hernández Dircio, su suegra Juana Dircio Barrios y su ahijado Antonio Pineda Patricio.

Asistieron en su mayoría integrantes de la Organización Independiente Campesina ’Vicente Guerrero’, agrupación que encabezaba Hernández Acevedo; también, defensores de derechos humanos, ex dirigentes históricos del PRD encabezados por el senador Félix Salgado Macedonio, normalistas de Ayotzinapa y padres de familia de los 43 estudiantes desaparecidos en Iguala.

Se concentraron los contingentes a la altura de la glorieta a ’Eucaria Apreza’, sobre el bulevar, y tomaron camino a la carretera que conduce a Tlapa, en el crucero hacia Ahuacuotzingo para llegar a Nejapa.

La marcha fue de unos ocho kilómetros, hasta arribar al llegar donde hace un año encontraron los cuerpos calcinados de los cuatro en una camioneta incendiada.

El contingente de personas fue resguardado por dos patrullas de la Policía de Tránsito municipal y al menos seis camionetas de la Policía del Estado. El momento más tenso sucedió cuando cruzaron por el trébol de la carretera hacia Atzacualoya y la carretera a Tlapa, en el punto conocido como Los Ajos.

En ese punto se ha colocado desde hace tres años un retén militar, y a su paso gritaron: ’cómplices, no intervinieron para evitar esos asesinatos. ¡Malditos!’, entre otras consignas.

Recriminaron a los militares que a pesar de que hayan establecido dos retenes en los accesos a Chilapa, ’los asesinatos, las ejecuciones no han disminuido; son unos cómplices que sólo están de palo y no intervienen en la defensa y protección de la ciudadanía’.

Cabe recordar que hace un año, a unos 15 metros del acceso a la comunidad de Nejapa, encontraron en llamas la camioneta de Hernández Acevedo, cuyo cuerpo junto con el de su mujer estaban maniatados, con huellas de tortura e incinerados en la parte posterior; los cadáveres de su suegra y su ahijado estaban en el asiento delantero.

En ese punto colocaron una ofrenda floral, miel de calabaza, pan, comida, maíz, fríjol, como ofrendas a su memoria. ’Aunque se haya llenado de horror este lugar, la memoria de nuestros compañeros es vida, porque lucharon por la vida, por defender la vida ante los poderosos, ante los abusos, por eso esta ofrenda’, aseveró la persona que encabezaba el carro con el sonido.

La FGE, cómplice de asesinos
Una de las hijas del fundador del PRD asesinado, Diana Hernández Hernández, dijo que a un año el crimen su familia está ’llena de rabia, de indignación y dolor; nos cuesta trabajo estar de pie, pero sabemos que no estamos solos y eso nos da valor’.

Sostuvo que el asesinato de su familia ’no tiene nombre; entiendo perfectamente que muchos líderes han caído y para nosotros perder a los pilares que nos daban la fuerza no es fácil de superar, (y) estoy encabronada con la justicia porque no vemos resultados y no sabemos qué está pasando en Guerrero’.

Lamentó que en ese corredor de Chilapa, Zitlala y Ahuacotzingo haya una violencia desbordada a diario. ’Nos están asesinando y esos grupos ya tienen poder, dinero, territorio. ¿Qué chingados quieren?’, cuestionó.

Dijo que su familia está molesta con el gobierno, ’porque en sus discursos sólo engaña a la gente, estamos cansados, no vamos a claudicar, que quede claro porque tenemos hijos, niños que están desprotegidos y nos sentimos destrozados porque no hacen nada, no hay investigación, no hay resultados’.

Aseguró que en la FGE hay ’compadres o amigos de quienes hicieron esto. Me siento mal porque ustedes perdieron a un amigo y nosotros perdimos una familia, mi familia no va a volver y eso duele, indigna, somos un país grandioso, pero hay gente inepta en las instituciones’.

Diana Hernández reiteró que en su familia no se van a quedar callados. ’Queremos resultados y que Enrique Peña Nieto rinda cuentas antes de que se vaya, porque es triste que deje a un país donde los inocentes están en las cárceles y los delincuentes en las calles’.

’No hay leyes que castigan a los delincuentes; no queremos que siga esto, esperando que seamos los próximos; por eso debemos de organizarnos desde el pueblo y mientras el gobierno no nos dé lo que necesitamos seguiremos luchando’, añadió.

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Marchan al lugar donde asesinaron a Ranferi Hernández y a familiares

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