La presencia del presidente colombiano Juan Manuel Santos y su esposa María Clementina en el homenaje en Bellas Artes al escritor Gabriel García Márquez es más que significativa, más allá de los méritos literarios del homenajeado, pues se trata del reencuentro de América Latina propiciado por las letras, por encima de la actividad política, cuya tarea más significativa es el arte de gobernar y de la unidad de los pueblos o los gobernados.
Porque independientemente del genio literario del escritor de Aracataca, desarrolló su autoridad moral para acercar a los gobernantes de la región con los jefes de Estado de la Unión Americana, y para hacer más llevadera la relación con Cuba, siendo eje rector en las relaciones entre mandatarios en beneficio de sus pueblos, y para la bajar la tensión derivada de los conflictos en la zona.
El Presidente colombiano junto con el presidente mexicano Enrique Peña Nieto –lo mismo que los líderes de la guerrilla colombiana o la disidencia cubana- reconocen en el magnífico escritor a un hombre que utilizó la república de las letras en beneficio de los gobernados, y rechazó el ofrecimiento de ocupar cargos públicos, administrativos, diplomáticos o de elección popular en su beneficio, para contar con la solidez de su prestigio que le dio mayores satisfacciones al paso transitorio del poder.
Lo mismo en China que en los Estados Unidos, la presencia del escritor y su prestigio, fue una carta de presentación para abrir puertas y enlazar gobernantes y pueblos, gracias a la magia de su literatura, más allá de ideologías, partidos o gobiernos; razas o lenguas, facciones o colores, para servir a la humanidad por encima de las diferencias personales, lo cual constituye un alto mérito que habrá de reconocerse más tarde, una vez que pase el análisis de su incuestionable obra literaria.
Hoy, el presidente Santos y el Presidente Peña Nieto, así lo demostrarán, como un paso hacia la unidad de América Latina.
TURBULENCIAS
Disputan fasto por la ciudad de Oaxaca
La conmemoración del 482 aniversario de la fundación de la ciudad de Oaxaca desató ancestrales diferencias en la clase política local, al acusar la administración municipal al ineficaz perredista secretario de Cultura, Francisco Martínez Neri, de agandallarse los festejos sin aportar una sola idea –porque no la tiene-, en tanto 24 escoltas asignados a la custodia del ex alcalde Luis Ugartechea se quejan de haber sido desplazados por el edil Javier Villacaña quien prefiere transportarse por las angostas calles de la Verde Antequera en lujoso vehículo blindado, a dejar su seguridad en su propicia policía; ahora piden que el munícipe transparente el costo de la renta del auto y las reglas para la asignación del contrato, para comparar si es que es cierto que “le sale más barato la paga a una agencia de seguridad del DF que a la cerril policía municipal”…El Alcalde de Cuautitlán Izcalli, Karim Carvallo Delfín, tomó protesta a Paola Marcela Aguilar Nava como Cronista Municipal, encargada de narrar la historia, costumbres y tradiciones del municipio hasta diciembre del 2015… Desde el púlpito de la Catedral metropolitana, donde ofició la misa de Domingo de Resurrección, al término de la Semana Santa e inicio del periodo Pascual, el cardenal Norberto Rivera Carrera expresó que la fe de los mexicanos debe ser más fuerte que los problemas sociales y pidió a la sociedad mexicana mantener la esperanza, sobre todo en estos tiempos de violencia en el país...
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