De fracaso en fracaso

Sócrates A. Campos Lemus

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Agosto 01, 2015 21:40 hrs.

Sócrates A. Campos Lemus › diarioalmomento.com

Política Nacional › México Ciudad de México


Muchas especulaciones se han desatado por el hecho de que la Señora Angélica Rivera de Peña Nieto, vacacione en Italia tal como la muestran muchas fotos publicadas en varios sitios de internet, esto hace que se hable de separaciones y desamores, de desencuentro y que se hagan públicas las cuestiones del corazón que suceden dentro de Los Pinos. Es cierto que si hay descontrol en las relaciones sentimentales y éstas afectan al presidente, sin duda impactan en muchas de sus decisiones personales en torno a la política, o bien, si tiene la serenidad y el control solamente será una situación que deja a un lado y no afecta, pero la realidad es que la credibilidad y la confianza, de acuerdo a lo que marcan las estadísticas, van para abajo, y los mexicanos, no piensan mucho en que se las merece. La situación económica, el aumento de la pobreza, la venta descarada de los bienes nacionales, los negocios privados realizados por medio de la utilización de los recursos o fondos públicos con las ligas de políticos, funcionarios y empresarios consentidos, la no aclaración de muchas dudas en torno a las relaciones y protección de contratistas que son preferidos por los miembros del gabinete y que muestran un enorme desaseo en la claridad económica y se especula de enorme corrupción en el seno del gobierno, los escándalos personales de familiares y de gentes cercana a sus afectos, en fin, hay mucho por lo que los mexicanos dejan de creer en su presidente y esto tiene que ser analizado y rectificado por el mismo. No se puede pensar que las cosas solamente se enderezan porque nadie habla del tema y porque se busca controlar los medios de comunicación y pagar a los que ya todos sabemos son los sicarios de la pluma a nivel presidencial. Por esa razón, no hay mucha credibilidad, no es lo mismo que se paguen notas para querer hablar bien del presidente y su política, y otra cosa, es la realidad que vivimos los mexicanos, uno y otra se contradice, y la verdad es que casi nadie lee lo que dicen los “chayoteros” del sistema, sino que, más bien, analizan lo que es su realidad cotidiana y de la lucha por sobrevivir en las condiciones de miseria y desocupación en las que estamos los mexicanos.
La inseguridad ha logrado impactar el terror y el horror nacional, nadie confía en las policías y hay dudas sobre la acción del ejército y la marina y no hay confianza en los servicios de “inteligencia” mediocres y corruptos que existen en el país, no se tiene confianza en el poder judicial y se conocen más los temas de escándalo que los buenos temas que apoyan a la justicia y la ley. El esfuerzo que hoy en día realizan el Secretario de la Defensa Nacional y el presidente para dar certidumbre al bien actuar de los miembros de ejército, se ven opacados por actos de violencia que se generan en contra de la población civil como en el caso de Tlatlaya y el de Ayotzinapa o Zacatecas y Guerrero, en fin, lo que se muestra es que hay una inseguridad en aumento, que en este año los asesinatos por la violencia en la Guerra contra el narcotráfico iniciada por Calderón, han aumentado en cuarenta mil mexicanos y que los desaparecidos también aumentan al igual que los desplazados, en fin, se puede hablar de que se lucha contra algo, pero no se puede decir que se aumenta la violencia porque se les combate, cuando en la realidad se nota y se ve la enorme mediocridad o la gran corrupción y complicidad existente entre delincuentes y policías, políticos, funcionarios, empresarios y banqueros. Así, la realidad es que los mexicanos sabemos que hay una guerra y que estamos todos expuestos a estar en el momento y lugar equivocados, y por tanto, ser asesinados, secuestrados y detenidos sin tener la seguridad de que seremos juzgados con justicia e imparcialidad, los jodidos, jodidos estarán, y sus familias sufrirán mucho Nadie puede creer en que la reforma energética es valiosa, cuando ve que los resultados son mediocres o nulos y que PEMEX, en vez de salir avante pierde cantidades multimillonarias, cuando sabemos que pronto se nos sorprenderá con otros gasolinazos y aumentos en el precio del pago de luz y gas, cuando la devaluación se genere en verdad, como ya está en la realidad a pesar de que se nos diga que estamos controlando el asunto, yo no puedo creer en un control cuando, por ejemplo hace unos días un tóner de impresora me costaba 800 pesos días después, aumentó a 956 pesos o cuando los medicamentos aumentan en forma descarada y sin control o los precios de las refacciones automotrices y en fin, el aumento es creciente y nadie tiene ya dinero que le permita alcanzar los fines de mes sin tener que solicitar préstamos o sufrir carencia y hambre. Los políticos gozan de buena salud y buen estado de sus finanzas. Lo vemos en sus semblantes, en sus fotos en las revistas del corazón, lo vemos y comprobamos en sus despilfarros y, ellos creen que lo hacen bien y que se muestran tal como son y les ayuda a estar en la publicidad política, cuando los demás mexicanos sufren de hambre, desocupación y de miseria y terminan, créanlo o no, mentándoles la madre y maldiciendo el momento en que se les creyó, por eso, cuando se habla de que no son tiempos de aceleres presidenciales ni son los tiempos del populismo, se nota ya la preocupación que existe en el descrédito que gozan los políticos y el sistema. Así que, cuidado, muchos cuidado, estamos ante la antesala de la violencia. La sociedad camina y los partidos son pachorros, mediocres y corruptos…. Al igual que sus “dirigentes”…”Tratándose de cerdos todo es dinero, pero tratándose de dinero, todo es de cerdos…”
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