Debilidad en los medios de comunicación

Sócrates A. Campos Lemus

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Febrero 12, 2016 11:02 hrs.

Sócrates A. Campos Lemus › diarioalmomento.com

Política Nacional › México Ciudad de México


PARA LOS GORDOS A LOS QUE NOS ENCANTA EL CHOCOLATE, EL ANUNCIO DE LOS INVESTIGADORES DEL IPN, NOS DEBE ALEGRAR ENDULZANDO LA VIDA: DESARROLLAN EN EL IPN CHOCOLATE PARA BAJAR DE PESO. SE PUEDE ADQUIR EN LAS TIENDAS DEL “POLISALUD” QUE ES LA COMERCIALIZADORA DE LOS PRODUCTOS DESARROLLADOS POR LOS INVESTIGADORES DEL POLI.
“Slo Mo Guyo presentador de programas por You Tube se mostró poniéndose en la lengüa una ratonera… ¿Lo podrán hacer los políticos en México?
En el Japón utilizan el Chile Habanero producido en Yucatán como un revestimiento para los cables de fibra óptica, para que los ratones y las ratas no dañen las líneas. No sé si se podría utilizar para que las ratas y los políticos en el país no se roben el dinero que nos pertenece a todos.
Lo dicen los periodistas en Veracruz: si no quieren que los periodistas escriban sobre tragedias, que no las provoquen los políticos…si quieren que escribamos sobre las buenas noticias, que renuncien a sus puestos y presupuestos y con seguridad que darán una gran noticia.
Con la pérdida de credibilidad en los medios de información al ser éstos los medios para controlar las notas y los acontecimientos en el país y no decir lo que en la realidad sucede, se ha provocado una reacción de los cudadanos, no solamente han perdido credibilidad y confianza en su información, ahora, cuando el poder genera una campaña para pretender destruir o restar confianza del público en contra de un candidato opositor, en vez de aceptar la tendencia y ser manipulados, las gentes reaccionan en sentido contrario y le dan confianza y credibilidad al hombre o partido que se opondrá a los dictados del poder. Esto demuestra que existe una gran debilidad entre los medios y el poder, de tal forma que al parecer los mismos medios, para sobrevivir en la confianza de sus lectores, radioescuchas o televidentes, debe dejar su dependencia con los grupos de poder y establecer una política de libertad en la información y en la comunicación, ligada más al análisis de los problemas y sus soluciones y no prestarse a las manipulaciones de la voluntad o de la opinión pública. Porque una cosa es la opinión publicada y otra la reacción de la opinión pública que es la que en la realidad se manifestará en los procesos electorales y en el mismo ejercicio del poder.
La nueva revolución de la comunicación está relacionada con los gustos y el manejo tecnológico que hacen las nuevas generaciones, y se van quedando en el camino los medios tradicionales, no solamente en el manejo político sino también en la operación publicitaria en el campo económico, así, la TV, radio y prensa están viviendo momentos difíciles porque la publicidad cambia de mecanismos y se pierden grandes cantidades de recursos porque las empresas y el mismo sector público están volteando sus miras e intereses en los nuevos mecanismos de información y comunicación. De acuerdo a un estudio aparecido en el último número de la Revista Nexos se explica: “Las empresas pierden mercado y rentabilidad a pasos acelerados. Hoy los jóvenes universitarios de clases medias no reconocen, ni siquiera en nombre, el Canal de las Estrellas, que hace apenas 20 años tenía la mitad de la audiencia nacional y era el buque insignia de la empresa Televisa; la mayoría de los automóviles nuevos no tienen frecuencia AM o simplemente no tienen radio. La audiencia de estos canales de radio, donde aún está la mayor parte de la oferta informativa local, está desapareciendo. La gran prensa ha perdido en diez años más de la mitad de su tiro, mientras las cabeceras de los diarios se multiplican; hay cada día más periódicos menos rentables. Todos los medios ajustan sus plantillas de redacción año con año; un periódico que tenía 100 trabajadores en el área de redacción en el año 2000 hoy tiene 30. Las radiodifusoras AM han bajado tanto su precio de sus spots que prefieren rentar el espectro por horas antes que explotarlo comercialmente. Las dos cadenas de televisión nacional, y más aún las locales, reportan números a la baja y caída de ventas no gubernamentales que llegan a 60 por ciento en los últimos cinco años”
La tendencia sin duda es la comercialización política y es así que en vez de aumentar su prestigio y credibilidad, los medios se hunden con la crisis que llevan los mismos políticos en su poca credibilidad y confianza entre la gente. Los grupos políticos le invierten a los medios para controlar o pretender controlar a la opinión pública y gastan enormes cantidades en medios que nadie lee ni escucha ni ve. Al tener mayor número de medios se genera una pulverización en la información con la saturación y las diferentes maneras de entenderla o comprenderla, así, la saturación en la información es una desinformación al público y todos sabemos que en los medios estatales o municipales, además de los nacionales, éstos son controlados por los servicios de comunicación de los gobiernos, y por tanto, todo lo que informan es para proteger a las gentes del poder, así como lo que no informan y la credibilidad y confianza se pierde más… la crisis es seria y sus resultados son complejos y peligrosos para la manipulación política y económica… al parecer, los medios, ya no cumplen con su función en el control político de la sociedad…
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