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Abril 16, 2014 18:17 hrs.

Gregorio Almazán Hernández › diarioalmomento.com

Política ›


Para José Luis Beato González, presidente de COPARMEX Ciudad de México, la Línea 12 del Metro ha resultado ser un fraude, hay que decirlo, primero, ante la indignación de los capitalinos que viven en el sur-oriente de la Ciudad, quienes han visto afectada su vida cotidiana; y segundo, por la cantidad de recursos públicos que están comprometidos para resolver este grave problema.

Así, a un mes de vivir sin la Línea 12 del Metro ¿en qué medida se han registrado las afectaciones?...

Al día de hoy, 11 de las 20 estaciones están cerradas (de Tláhuac a Culhuacán), afectando a 435 mil potenciales usuarios, 61% de los cuales provienen de las Delegaciones Iztapalapa y Tláhuac1, delegaciones con grandes y graves necesidades de movilidad.
Las pérdidas en cuanto al tiempo y gastos de traslados, ha regresado al que los usuarios registraban antes y durante la construcción de la obra, es decir, hasta de 2 horas y media por día y $18 pesos diarios por persona.
Las empresas, ya hemos registrado efectos a la baja en la productividad (retardos hasta de 40 minutos) derivado de la duplicación en los tiempos de traslado de los colaboradores y en consecuencia, estrés, en detrimento de la calidad de vida. Al respecto, hay que recordar que según datos revelados por la UNAM, el 46% de los usuarios utiliza la Línea 12 para acudir a trabajar.2

Asimismo, dijo pero, mientras la Línea 12 del Metro no se vuelva a poner en marcha, las afectaciones serán muy graves para la competitividad del Distrito Federal, pues han quedado pospuestas las 25 mil fuentes de empleo directo y las 50 mil de empleos indirectos que esta obra generaría, así como la derrama económica para la Ciudad de México de por lo menos 20 mil millones de pesos de acuerdo con la información pública disponible generada por el Proyecto Metro del Distrito Federal (órgano desconcentrado del GDF a cargo de la obra).3

En ese sentido, la COPARMEX Ciudad de México, dice que resulta muy preocupante la cantidad de recursos económicos que ya ha comprometido el Gobierno del Distrito Federal para reparar y resarcir los daños, pues de acuerdo a la información disponible, el recuento de los mismos nos indica que:

La Línea 12 del Metro tuvo un costo superior a los 24,500 millones de pesos
Se prevé que las reparaciones a la Línea 12 tendrán costos entre los 700 y 900 millones pesos.
Que 163 millones de pesos es lo que le está costando a todos los capitalinos, colocar 300 camiones RTP que están dando servicio gratuito entre las estaciones Tláhuac a Culhuacán.
El Gobierno de la Ciudad solicitó ya a la Secretaría de Finanzas una ampliación en el presupuesto por 475 millones de pesos, para cubrir el mantenimiento preventivo y las reparaciones de las fallas en las estaciones.
Los estudios solicitados que realizarán empresas europeas sobre el estado de las vías y ruedas férreas de los trenes superarán los 530,000 pesos.
A esto, hay que añadir que, de concretarse la propuesta del director del Sistema de Transporte Colectivo Metro, Joel Ortega, por reembolsar 10 pesos a los usuarios de la Línea 12 por cada día que se mantenga en suspensión el servicio, la cifra podría llegar a superar los 350 millones de pesos, sólo tomando en cuenta a los poco más de 170 mil usuarios de las estaciones que hoy se encuentran cerradas en un supuesto de reinicio de operaciones en septiembre próximo, como algunos especialistas han prospectado.
Y, sin que todo lo anterior fuera ya suficiente, en el absurdo del problema, el Gobierno del Distrito Federal no encuentra cómo justificar debidamente ante la Secretaría de la Función Pública del Gobierno Federal, el ejercicio de 489 millones de pesos destinado a las obras de la Línea Dorada.

A todas luces, la Línea 12 del Metro se ha convertido en una vergüenza nacional.

Recordó, que la Línea 12 fue una obra de infraestructura y movilidad emblemática, de colaboración política, que permitió gestar los recursos federales y locales para su necesaria construcción, misma que luego de 5 años de trabajos, generó molestias y en muchos casos, quiebra de negocios. Ahora, ni los vecinos que vieron afectada su vida diaria tienen Metro y nadie (ni autoridades ni empresas) se responsabilizan por la pérdida millonaria y el boquete al erario de las finanzas de la Ciudad de México.

Finalmente, afirmó que para la COPARMEX Ciudad de México no hay duda de que debe haber un castigo ejemplar para quienes resulten responsables. La pérdida de tantos millones de pesos no puede quedar impune. La exigencia va a las autoridades de la Ciudad de México, a la Comisión Especial que investiga el tema en la Asamblea Legislativa, a la Secretaría de la Función Pública y a la Auditoria Superior de la Federación para que sean exhaustivos en sus investigaciones y ofrezcan resultados sólidos que ayuden a fincar las responsabilidades necesarias.

Los usuarios de la Línea 12 del Metro y todos los capitalinos, debemos conocer ya, por parte de la autoridad, los tiempos y acciones sobre lo qué se va hacer y cuándo volverá a funcionar esta ruta, con plenos estándares de seguridad para los usuarios.

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Por afectaciones de Línea 12 empresas han registrado baja productividad

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