ALCALDES DEL PAN, EDGAR OLVERA Y ENRIQUE VARGAS SE LANZAN LODO, SE ACUSAN DE CORRUPTOS

ALFREDO IBÁÑEZ
Naucalpan, Edomex.- Los alcaldes del PAN, de Naucalpan, Edgar Olvera y de Huixquilucan, Enrique Vargas, se enfrentaron en una guerra de misivas, en la que ambos se exhiben como abusivos, extorsionadores, violadores de la ley, en suma como corruptos.
El gobierno de Edgar Olvera sostuvo a través de un boletín que el domingo pasado enrique Vargas, acompañado de sus guaruras rompió los sellos que le fueron colocados a su negocio, denominado Hooster, ubicado en Plaza Satélite.
Clausura realizada el viernes pasado por no tener seguro vigente, exhibir válvulas de tanques de gas caducas, y no tener puntos de concentración para casos de contingencia.
Desbordando prepotencia, el alcalde de Huixquilucan, y siempre acompañado de sus guaruras que portaban armas, rompió los sellos, amenazó al personal de Protección Civil de Naucalpan e inició la gresca.
La administración de Naucalpan agregó que al percatarse Vargas del Villar que el operativo era grabado, abandonó el inmueble, cerró las puertas con candados, dejando encerrados en el interior a los elementos de protección civil.
El gobierno municipal, precisó que desde la semana pasada, personal de las direcciones municipales de Protección Civil, Normatividad y Seguridad, llevan a cabo un operativo en establecimientos con venta de bebidas alcohólicas para salvaguardar la tranquilidad de los visitantes y la sana convivencia.
En respuesta, el alcalde de Huixquilucan, sostuvo que Edgar Olvera es mentiroso, al señalar que no tiene con seguro vigente el negocio clausurado.
Dijo que su empresa Hooters de México SA de CV cuenta con la póliza del seguro 1-430-35557/0 expedida por la empresa aseguradora RSA seguros, vigente desde las 12:00 horas del 20 de agosto de 2016 hasta las 12:00 horas del 20 de agosto de 2017.
Tras calificar a su compañero de partido el PAN, Edgar Olvera, de intentar extorsionarlo, sostuvo que presentó una denuncia penal en su contra por los delitos de allanamiento de morada, intento de extorsión e ingresar a una propiedad privada sin ninguna orden oficial.