CUSAEM bajo escrutinio

Nuevamente se encuentra en el ojo del huracán el cuerpo de ’policías’ no regulado denominado CUSAEM, el cual tiene sus orígenes en el Estado de México, pero con presencia en casi todo el país.

Con más de 40 mil integrantes, tal instancia no tiene registro que permita conocer si es empresa privada o pública, lo cierto es que por décadas fue protegida por los gobiernos federales y estatales del PRI en turno.

No rinde cuentas a nadie de su actuación y menos en lo que compete al rubro económico, que por cierto le deja millonarias ganancias por los servicios que presta, tales como vigilancia en Secretarías de Estado, autopistas, instalaciones nucleares, hospitales e incluso, sirven de escolta a secretarios de Estado y empresarios.

A lo largo de diversos sexenios, los directivos de CUSAEM se han embolsado millonarias ganancias, sólo en los años 2012 y 2015, el gobierno federal les concedió contratos por 2 mil millones de pesos.

En contraparte los guardias que lo integran perciben salarios que apenas superan los 6 mil pesos mensuales, no gozan de seguridad social, pese a que les descuentan por concepto del pago de ISSEMyM.

CUSAEM es un negocio de seguridad irregular, sus elementos no son sometidos a exámenes toxicológicos, polígrafo o psicométricos. Las auditorías en ese organismo no existen.

Legisladores de Morena no quitan el dedo del renglón y adelantaron que insistirán para que con el nuevo gobierno estatal se regularice esa instancia policial, que por décadas ha evadido la rendición de cuentas.

No es posible, señalaron, que no informen lo correspondiente al origen y destino de cientos de millones de pesos que obtienen por sus servicios, que no paguen impuestos y que no le de seguridad social a sus trabajadores.

Un asunto más que se suma a la lista de pendientes que deberá resolver la gobernadora Delfina Gómez, el cual pudiera ser abordado junto con el gobierno federal, pues gran parte de los contratos obtenidos provienen de la federación.

alfredoibanezjuarez@yahoo.com.mx

@ibanezalfredo