Estampas

“La lujuria no guarda memoria
de los cuerpos que devora...”


El deseo se roe a sí mismo.
Dicen que el hombre es fuego y la mujer estopa, el Diablo viene ysopla...
Enseñaba don Alfonso Martínez de Toledo:
“...luxuría es causa eficiente e final de debilitar el humano cuerpo, que priba al onbre del sueño, fáselo antes de tiempo envejeser e encanecer, los nienbros tenblar, los cinco sentydos anterar”.
Y sentía placer al contar:
“... Una muger que cortó sus verguenzas a un onbre enamorado suyo, llamado Juan Orenga, guarnecedor d´espadas, natural de Tortosa, porque sopo que era con otra echado. Tomóle un día retosando su vergüenza en la mano e cortógelo con una navaja e dixo:
¡Traidor, nin a ty, nin a mi, nin a otra jamás nunca servirá! E tyró e cortó a fueyr, luego ella e quedó el cuytado desangrándose”.
Y don Rodrigo contaba:
“...Una muger casada que con los dientes cortó la lengua a su marido, que ge la hizo burlando meter en la boca e apretó los dientes, e asy se la cortó. E quedó mudo e lysiado. Fuyó luego la muger a un monasterio de menoretas. Fuele demandada por la justicia por qué lo avía fecho. Dijo que lo vido fablar con una de quien ella se sospechava, en secreto muchas vezes. Díxole: ¡Con ésta jamás a ella nin a otra fablando engañarás”.
Bueno, Dios nos libre de quebrantar el séptimo mandamiento... Lo bueno es que ya es otra época.
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