La deuda externa de México y la Intervención Francesa

LA CATASTRÓFICA DICTADURA SANTANISTA.

LA DICTADURA DE ANTONIO LÓPEZ DE SANTA ANNA. quien se hacía llamar ’Su alteza serenísima’ llego a Presidencia del país en seis ocasiones: de 1834 a 1835, 1839, de 1841 a 1842, de 1844 a 1847. cuando la población era de 8.8 millones, él ha sido uno de los presidentes más polémicos que tuvo México, ya que los gobernantes que se aferran al poder, son olvidados o lapidados, su afición eran las mujeres y las peleas de gallos.

El Plan del Hospicio, surgió en Guadalajara, Jal. En 1852, acordado por los comerciantes, hacendados, y canónicos del cabildo eclesiástico reunidos en una junta de Notables, que proclamaba el desconocimiento de todos los poderes públicos y al presidente Mariano Arista, es decir, se preparaba nuevamente la vuelta al poder de López de Santa Anna.

El presidente Arista sin recursos económicos para dominar la insurrección, renuncia a la presidencia y es sustituido por Juan Bautista Ceballos, que en poco tiempo tiene que observar el golpe de estado que disolvía la Cámara de Diputados y nombra al general santanista Lombardini. Se convoca a un Congreso pero sin ninguna facultad legislativa, esta debían ejercerlo las legislaturas de los estados y en su defecto, los gobernadores de estos, quienes nombrarían al nuevo presidente, que resulto ser Antonio López de Santa Anna .

Por su parte, los inicios de la trayectoria de Benito Juárez, se da cuando siendo gobernador de Oaxaca se une al Plan de Ayutla del 1º. De marzo de 1854 encabezado por don Juan Álvarez Hurtado, Ignacio Comonfort de los Ríos y Florencio Villarreal (nacido en Cuba), revolución que lograría expulsar del poder al dictador Antonio López de Santa Anna, Lucas Alamán su tutor y partidario de una monarquía, había fallecido un año antes.

Al llamado del Congreso del estado de Jalisco que alzó la mano para convocar al pueblo a la lucha, inmediatamente le siguió el Congreso de Chiapas, siendo su presidente don Ángel Albino Corzo Castillejo. Y como era de esperarse la revolución triunfo repudiando al dictador, por lo que el general Álvarez Hurtado fue nombrado presidente interino y Juárez, Ministro de Justicia e Instrucción Pública.

LOS TRATADOS DE MÉXICO

El Tratado de Mon-Almonte que fue firmado el 26 de septiembre de 1859 por Juan Nepomuceno Almonte del grupo conservador y Alejandro Mon, representante de la reina Isabel II de España, en México; se buscaba reestabler las relaciones entre México y España y porque los conservadores mexicanos, buscaban apoyo en su lucha contra los liberales durante la guerra de Reforma.

Entre los principales aspectos del tratado se contemplaba un préstamo a la facción conservadora, el cual debía ser pagado al triunfo de estos, pero esta deuda terminó pasando al gobierno liberal el cual fue al final vencedor del conflicto, agregándose a la ya de por sí cuantiosa deuda externa con las naciones europeas. También se ratificaba el Convenio de 1853, en el que Santa Anna se comprometió a pagar una deuda de gran consideración procedente desde la época del Virreinato, y Juárez con toda razón se negó a reconocer el tratado por considerar que ese gobierno conservador era ilegítimo.

En esta época expidió la Le Juárez, oficialmente conocida como Ley sobre administración de justicia y orgánica de los tribunales de la Nación, del Distrito y Territorios. Esta ley cancelaba los derechos de militares y eclesiásticos, y suprimía los tribunales "especiales" que tenían ambos organismos.

En 1858, Juárez se convirtió en presidente de la República por primera vez tras el autogolpe de estado de Ignacio Comonfort quien decidió aliarse al Plan de Tacubaya y dimitió convirtiéndose de acuerdo a la Constitución en presidente al ser Ministro de Justicia y Félix María Zuluaga, quien estaba apoyado por el ejército y el clero, y las clases afectadas por las leyes promulgadas durante el mandato del mismo Comonfort, basadas en la Ley Juárez, fue declarado también presidente por los conservadores.

Miramón soldado de los conservadores y la iglesia ocupó la presidencia del 2 de febrero de 1859 al 13 de agosto de 1860 como presidente sustituto, del 15 de agosto al 24 de diciembre de 1860 como presidente interino.

Así el 14 de diciembre de 1859 se firmó, en el puerto de Veracruz, México, el Tratado McLane-Ocampo, formalmente conocido como el Tratado de Tránsito y Comercio. Los firmantes fueron Robert McLane, enviado especial del presidente estadounidense James Buchanan, y Melchor Ocampo, ministro de Relaciones Exteriores del gobierno liberal presidido por Benito Juárez. El documento está conformado por once artículos, más dos convencionales. Esto últimos se establecieron con la intención de hacer cumplir las estipulaciones del Tratado y mantener el orden y la seguridad en los territorios de cada una de las dos Repúblicas.

Las condiciones de este Tratado respondían a la compleja realidad del momento. Mientras el presidente estadounidense James Buchanan favorecía fuertemente el arreglo, tan conveniente a sus políticas expansionistas, al presidente Juárez necesitaba con urgencia el dinero para financiar la guerra contra los conservadores. Sin embargo, el acuerdo nunca fue ratificado por el Senado de los Estados Unidos porque, que inmerso este país en su guerra de sucesión, temía fortalecer a los estados separatistas y esclavistas del sur.

Así, la necesidad de reconocimiento internacional y recursos obligó a los liberales a firmar el Tratado gracias al cual el gobierno liberal obtenía automáticamente el apoyo militar de estadounidense. Pero los conservadores tenían sus propios aliados, principalmente Francia, aunque en un principio también estaban España e Inglaterra, y habían firmado los tratados Mon-Almonte y de Miramar, que eran más onerosos que el McLane-Ocampo.

La Dra. Patricia Galeana, miembro de la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística dice: ’Hay que tomar en cuenta que el tratado se firmó el 14 de diciembre y el ataque por mar y tierra a Veracruz se dio el 6 de marzo siguiente. Si Juárez no hubiera firmado, la ayuda de Estados Unidos no se habría dado y el gobierno liberal habría desaparecido".

Y agrega la historiadora mexicana, ’Francia quedó evidenciada en su política anexionista. Además, México también mejoró su posición para buscar recursos con prestamistas particulares, estadounidenses y europeos. En este sentido, el Tratado McLane-Ocampo parece más un acto meramente pragmático por parte de Benito Juárez, quien pudo financiarse para ganar la guerra un año después, transformando al país a partir de su legislación liberal, y preservar soberanía nacional bajo las continuas amenazas del exterior’.

ANTECEDENTES DEL CONFLICTO DE FRANCIA, INGLATERRA Y ESPAÑA CON MÉXICO.

De hecho el conflicto con Francia había empezado con la guerra de los ’pasteles’, el conflicto bélico entre Francia y México llevado a cabo del 16 de abril de 1838 al 9 de marzo del 1839, surgió a partir del reclamo de un francés que poseía un restaurante en México y pedía que se lo indemnizara económicamente $ 600,000 pesos porque en 1832, soldados en estado de ebriedad del presidente López de Santa Anna, habían consumido y destruido muebles.

Hay que recordar que la presencia de los capitales franceses se hacía sentir en la banca, las minas y la metalurgia, la industria, en especial la textil, y el comercio. A estas alturas, el problema principal de Francia era la guerra con el imperio austrohúngaro. Además, el interés de Napoleón III para conquistar a México eran principalmente Tres: por la Plata, hacer un canal interoceánico en istmo de Tehuantepec y cerrar el paso hacia Latinoamérica a los Estados Unidos.

El 8 de enero llego la escuadra francesa a Veracruz y desembarca el general Juan Prim en el mismo puerto. El enero 9 se efectuó la primera consecuencia de los tres comisarios en Veracruz, los tres nombraron como único secretario para las conferencias al secretario del general Prim. Y para ilustrarnos de los atroces procedimientos de los conservadores para conservar el poder, veamos el importante relato siguiente:

En enero 14 de 1862 se realizo la conferencia sobre los bonos de Jecker, y Arrangoiz dice: ’Nada notable ocurrió en las conferencias, hasta que se trato las reclamaciones de Jecker, las cuales Juárez no había querido reconocer. Era el señor Jecker un banquero establecido en la capital natural de Suiza y de cuyo país hasta su reclamación había pasado en México por ciudadano, pero repentinamente sin que hubiera residido en Francia, ni se supiera en México que los señores no hubieran prestado servicio a aquel país, apareció como ciudadano francés y en tal supuesto presentaba sus reclamaciones y la de los franceses Yurién de la Graviére y la de Saligny. El conde Reus decía el 14 de enero al oír hablar del contrato Jeker y Compañía, exclamaron a una voz los representantes ingleses, que era una exigencia inadmisible, expuso el ministro sir Charles Wyke, que, próximo a caer recibió Miguel Miramón y Tarelo, nombrado presidente en 1859 por el plan de Tacubaya de dicho banquero o prestamista, la suma de 750,000 pesos en metálico, y a cambio entrego bonos del tesoro por 14 millones de duros. Este contrato leonino y escandaloso que causó según sir Charles Wyke, un descontento general en el país, y tiene dicho señor por seguro que jamás será aceptado por el actual gobierno de Juárez, ni por otro alguno que entre a regir los destinos de México’ .

Hay que recordar que el plan de Tacubaya fue un pronunciamiento del bando conservador promulgado el 17 de diciembre de 1857 y Félix María Zuloaga en el Palacio Arzobispal de Tacubaya, fue quien dio la orden del múltiple fusilamiento de médicos y enfermeros que habían llegado para atender a los heridos y fue también él quien fusiló sin juicio alguno a Melchor Ocampo en Tepeji del Rio. Qro.

El mismo día 14 salió de Veracruz hacia la Ciudad de México el portador del ultimátum de los tres emisarios, pidiendo a Juárez satisfacción de agravios. El francés pedía satisfacción por la suspensión de pagos de la deuda francesa, por insultos hechos a Francia en la persona de varios franceses y principalmente en la de Dubois de Saligny, y por falta de reconocimiento de los bonos Jecker; el inglés pedí a satisfacción por la suspensión de pagos de la deuda inglesa y por la sustracción de 660,000 por Miramón, y el español pedía explicación por la suspensión por la suspensión de pagos por la deuda española y por la falta de reconocimiento del tratado Mon-Almonte, el cual entrañaba la petición de satisfacción por la falta de cumplimiento del tratado de 1853, y por los asesinatos de españoles cometidos en San Vicente Chiconcuac, Morelos y en San Dimas, Durango.

Meyer dice en su obra El Cactus y el Olivo: ’Justo en el momento del ascenso liberal en 1856, los conflictos entre terratenientes y comunidades indígenas tocaron fondo, dando lugar a la violencia de unos contra otros. El 15 y 16 de septiembre de ese año (1856), en el mineral de San Dimas, Durango, la población atacó y saqueó el establecimiento de los españoles Juan y Andrés del Castillo. El saldo de este enfrentamiento fue el saqueo, la muerte de media docena de españoles y la ruptura de relaciones entre México y España’ .

SUSPENCIÓN DEL PAGO DE LA DEUDA

Como consecuencia de los conflictos vividos en México, para hacer respetar las Leyes de Reforma, el presidente Benito Juárez, el 17 de julio de 1861, solicita al Congreso aprobar el Decreto por el cual se suspendía por dos años el pago de todas las deudas públicas, incluyendo las contraídas con el extranjero. El Congreso se erige en gran jurado y ahí se dieron fuertes discusiones con elocuentes piezas oratorias, entre otras la de Manuel Payno en defensa e Ignacio Manuel Altamirano en contra, debemos recordar que existían dos bandos entre los hombres de la Reforma: los moderados y los radicales.

Esto motivo la llegada de los representantes de Inglaterra, Francia y España, con sus respectivos buques armados. Si bien era cierto que México tenía esas deudas, también lo era, que los empréstitos no fueron hechos los liberales y las arcas de la nación estaban vacías por la prolongación de la guerra, con la clara intervención de la iglesia católica y los caciques militares, además, solamente era suspensión por dos años. Estos eran los montos de las deudas: a Inglaterra: $69, 994,542.00, a España: $9,460,986.00 y a Francia: $2,800,762.03 centavos .

Ese mismo día, una representación de 51 diputados llega ante Juárez pidiéndole su renuncia como presidente de la República, para que fuera ocupada por el general Jesús González Ortega, pero más tarde, también se presentan 54 diputados diciéndole que no renunciara y es así, como Juárez continúa como presidente de la República.

En México los encuentros bélicos continuaban en diversas partes del país, unas ganadas por los conservadores y otras el triunfo correspondía a los liberales. Afortunadamente para México, los Estados Unidos 14 años después de haberle cercenado el 51% de su territorio, cuando no existía el Derecho Internacional, sino la ley del más fuerte, un presidente como Abraham Lincoln, decide de manera distinta a la esperada por europeos, Francia principalmente, y sus ideas eran también en su país en contra del conservadurismo, es decir, la misma línea del presidente Benito Juárez.

A mediados de septiembre del año 1861, los conservadores: José Manuel de Hidalgo, Juan N. Almonte y José María Gutiérrez de Estrada, promovían el establecimiento de la monarquía en México, y que el monarca fuera Fernando Maximiliano de Habsburgo. La rebelión federalista de 1840 contra Anastasio Bustamante fue otro más de los enfrentamientos armados que en ese entonces sacudieron a la capital y motivo para que Gutiérrez de Estrada, ex ministro de Relaciones Exteriores, planteara el regreso a la monarquía para terminar con los conflictos internos.

Así el día 4 de diciembre de 1861, el gobierno norteamericano da respuesta a las diversas invitaciones de Inglaterra, España y Francia para que se uniera a las reclamaciones. Destacamos la Cláusula 3ª. Que dice: ’Los Estados Unidos se interesan seriamente en la prosperidad de la República Mexicana; que han dado amplios poderes a su ministro acreditado acerca de aquel gobierno, para que haga un tratado destinado a auxiliarle, y que se pondrá, así lo esperamos, en situación de satisfacer las justas reclamaciones de los soberanos citados, y apartar por este medio la guerra que quieren emprender contra México’

En virtud de las asechanzas contra México, principalmente de Francia y las claras complicidades de algunos mexicanos, el gobierno de México decide el 25 de enero de 1862 expedir la llamada Ley Juárez, la que serviría en 1867 para juzgar a Maximiliano de Habsburgo y a los generales del bando conservador: Tomás Mejía y Miguel Miramón.

Siempre en el avance de las sociedades, han surgido hombres y mujeres que levantaron su voz y enseñaron su inteligencia para manifestarse por el logro de la justicia y la libertad. Uno de esos seres virtuosos fue el general Juan Prim, representante de España, quien firmo el Convenio de la Soledad el 19 de febrero de 1862 y se retiró a su patria, porque no estuvo de acuerdo con la invitación del representante de Francia, para intervenir en la vida económica y política de México. Cabe el supuesto de que el general Prim , tuvo contacto con los que representaban a las instituciones filosóficas de México, esos dignatarios y reconocidos liberales eran: Ignacio M. Altamirano, Juan Arias y Alfredo Chavero .

A principio del mes de abril, el emisario español y los ingleses salen de Veracruz, rumbo a sus respectivos países, pero el ejército francés continúa firme avanzando hacia el centro de México y el día 19 de abril de 1862, ocurre el primer ataque militar a los mexicanos, en Fortín, población ubicada entre Córdoba y Orizaba.

CONSECUENCIAS DE LA INTERVENCIÓN FRANCESA EN MÉXICO.

Los resultados de la intervención de Francia en México, apoyada por Bélgica, Alemania, Austria, el papa Pío IX y mercenarios diversos, fue para Napoleón III desastrosa y vergonzosa ante el mundo, sin embargo, el Patricio mexicano don Benito Juárez, recibió el reconocimiento de muchos países latinoamericanos, llamándolo ’Benemérito de las Américas’.

Agregamos, que existen algunos documentos que se titulan ’la República Restaurada’, pero nosotros consideramos que esta mal esa apreciación, porque como bien sabemos, los franceses y conservadores nacidos en México, nunca ocuparon la mayor parte del territorio mexicano, sólo pequeños espacios y temporalmente, de las 25 entidades federativas de ese entonces 18 siempre se defendieron con heroísmo.

Cuando la situación ya era muy difícil en sus negociaciones para evitar la intervención, andaban solicitando que un hombre rubio y barbado que viniera a gobernarnos, Juan Antonio de la Fuente escribió al Presidente Benito Juárez una carta del 4 de septiembre en la que decía: "Las disposiciones adoptadas por los Gobiernos de Francia y de Inglaterra, en consecuencia de la ley expedida el 17 de julio, son abiertamente hostiles para nosotros. Resolución de España, Francia e Inglaterra de hacer reclamaciones a México a mano armada".

En abril de 1864 Maximiliano de Habsburgo, recibe a la Comisión de mexicanos conservadores que le ofrecen la corona de México, y así se convierte en ’emperador sin imperio. Los interesados y representantes de la iglesia fueron quienes buscaron en el Vaticano y ante Napoleón III un príncipe que viniera a gobernar a México como si les perteneciera; esa era la voz de los altares que despreciaban la situación de pobreza vivía la mayor parte del pueblo, y quería continuar con los negros tiempos de la ’Santa Inquisición’. Esos emisarios fueron: José Ma. Gutiérrez de Estrada, Pelagio Antonio Labastida y Dávalos, Juan Nepomuceno Almonte , José Manuel Hidalgo, Antonio de Haro y Tamariz.

La historia también registra que desde el Vaticano, se designaban a los altos jefes de la iglesia católica, y en esa época en México eran entre otros: Francisco Javier Miranda y Morfi, Francisco Orozco y Jiménez (obispo de San Cristóbal, Chis.), Pelagio Antonio Labastida y Dávalos (obispo de Puebla), Clemente de Jesús Murguía (obispo de Michoacán) y Carlos Ma. y Rubio (obispo de Colima), entre otros.

Veamos lo que registro el Sacerdote Dr. Agustín Rivera, en su obra La Reforma y el Segundo Imperio: ’El 19 de abril de 1864 visita de Maximiliano y Carlota al Papa, en la noche dieron un banquete de cincuenta cubiertos a cardenales y muchas otras personas de las principales de la sociedad de Roma. Todos estaban muy contentos porque Maximiliano iba a devolver a la iglesia mexicana sus bienes. Y continúa: el 20 de abril, Comunión eucarística de Maximiliano y Carlota. Oyeron la misa que celebró Pío IX en la capilla Sixtina’ .

Y Zamacois en su Historia de México, tomo 17 Pág. 183, anota: ’El 20 de abril en seguida recibieron, con profundo recogimiento católico, la comunión de manos del mismo Santo Padre: ’He aquí, el cordero de Dios que borra los pecados del mundo. Por El reinan y gobiernan los reyes; por El imparten los reyes la justicia; si a menudo permite que sean probados los reyes, por El, sin embargo, se ejerce todo el poder. Os recomiendo a nombre suyo, la dicha de los pueblos católicos que os son confiados. Grandes son los derechos de los pueblos, siendo por lo mismo, necesario satisfacerlos, y sagrados son los derechos de la iglesia, esposa inmaculada de Jesucristo, que nos ha redimido al precio de su sangre, que dentro de un instante va a señir vuestros labios. Respetareis pues, los derechos de la iglesia; lo cual quiere decir, trabajareis por la dicha temporal y por la dicha espiritual de aquellos pueblos. Así nuestro Señor Jesucristo, a quien vais a recibir de mano de su vicario, os conceda sus gracias en la abundancia de su misericordia’

En este sermón del papa, observamos las indicaciones dadas a Maximiliano: el cordero de Dios borra los pecados del mudo; por él reinan y gobiernan los reyes; por él los reyes imparte justicia; os recomiendo la dicha de los pueblos católicos; sagrados son los derechos de la iglesia; respetareis pues, los derechos de la iglesia. Esta cita nos deja ver hasta dónde llegaban los intereses económicos y políticos de los reyes europeos y el vaticano, no obstante la Revolución Francesa del 5 de mayo de 1789 y aquí en Puebla el 5 de mayo de 1862, en que Francia perdería otra batalla, con su ejército que se creía el ’mejor del mundo’. Por cierto, este Papa Pío IX una revolución liberal en 1848 lo obligó salir huyendo del Vaticano disfrazado y refugiarse en Nápoles, pero el presidente general José Joaquín de Herrera, le ofreció $25 mil pesos y que estableciera en México su cede papal, él no aceptó.

LOS TRATADOS DE MIRAMAR.

El 15 de mayo de 1864, se recibió en la capital de México la noticia de la aceptación de la corona por Maximiliano, y fue cuando Carlota dijo a su esposo Maximiliano: ’Si no podemos tener un hijo, tengamos un imperio’. El 28 de mayo, llegan al puerto de Veracruz Maximiliano, esposa Carlota y la comitiva, durante el viaje Maximiliano se ocupó de redactar un largo y minucioso Protocolo que debía cumplirse en ’su castillo de México’. Sin embargo, existe la versión que, debido a la frialdad de la Emperatriz Carlota, Maximiliano se refugiaba en la Ciudad de Cuernavaca, Mor., y que se consolaba en brazos de Concepción, una bella mujer hija del jardinero de su residencia, con la que incluso, se dice, tuvo un hijo.

Dicen las crónicas que fueron recibidos fríamente, por pocos mexicanos, pero abundaba una zopilotera, pensamos que era el augurio de sus sueños y lo que les sucedería años después. Lo que son las coincidencias, también un 15 de mayo pero de 1867, sucedería algo importante, pero para Maximiliano decepcionante, en esa fecha fue hecho prisionero en el cerro de Las Campanas, Qro. Y el presidente Juárez, entra a la Ciudad de México el 15 de julio, después de cuatro años de cruenta lucha por la república.

Transcribimos parte de la contestación de fecha 28 de mayo a la carta de Maximiliano, el presidente de México Benito Juárez estando en Monterrey le dice: ’Es dado al hombre, señor, atacar los derechos ajenos, apoderarse de sus bienes, atentar contra la vida de los que defienden su nacionalidad, hacer de sus virtudes un crimen y de los vicios una virtud; pero hay una cosa que está fuera del alcance de la perversidad, y es el fallo tremendo de la historia. Ella nos juzgará’.

Dice Zamacois ’Junio 12 de junio, entrada solemne de Maximiliano y Carlota en la capital de México, pero ¡oh sorpresa!, el día 28 del mismo mes de mayo, el archiduque publica dos Decretos, en el primero fue asignándose un sueldo de un millón y medio de pesos anuales y doscientos mil pesos como sueldo para su emperatriz; y el presidente Juárez, como buen republicano había mandado al Congreso una solicitud de sueldo de $36,000 también anuales. Si los montos de estas deudas eran: a Inglaterra: $69, 994,542.00, a España: $9,460,986.00 y a Francia: $2,800,762.03 centavos, vemos que el sueldo anual que se asignó el archiduque austriaco, era la mitad del monto de la deuda reclamado por Francia y el de la emperatriz Carlota seis veces mayor que la del presidente Juárez.

El presidente Benito Juárez, valorando la aportación y sacrificio de muchos de los miembros de la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística, la protegió y dio instrucciones de que se ubicara en una sala del Palacio Nacional donde él despachaba, él residía en la calle de Moneda No. 1, y en palacio se reunían los hombres de la Reforma, además asignó a la Sociedad una cuota mensual para su desarrollo. Y otra alta distinción: autorizó el uso de los tres colores de la Bandera Nacional en la Venera.

Tiempo después, como un reconocimiento a muchos de los miembros de esta Sociedad, por los aportaciones y esfuerzos personales, los Poderes de la República colocaron los restos de muchos de ellos, en la ’Rotonda de Personajes Ilustres’. Por eso el H: Congreso de la Unión le confirió el título de ’Ilustre y Benemérita’ en 1914 y el H. Congreso del Estado de Jalisco, le ratificó esta noble distinción en 1989 a su Correspondiente en Guadalajara.

Los resultados de la intervención de Francia en México, fue desastrosa y vergonzosa ante el mundo, sin embargo, el Patricio mexicano don Benito Juárez, recibió el reconocimiento de muchos países latinoamericanos, llamándolo ’Benemérito de las Américas’. México ya era República y siempre estuvo bajo un gobierno republicano, con sus tres poderes: el ejecutivo, representado por su presidente legítimo el estadista Benito Juárez García, el legislativo y el judicial.

Winston Churchill, dijo: ’Si abrimos una disputa entre el pasado y el presente, descubriremos que hemos perdido el futuro’. Pero nosotros decimos que Juárez: estudio el pasado, con los hombres de la reforma sublimo su presente y proyecto al futuro la República.

Respecto a la imparcialidad del escritor, Modesto de la Fuente, en su obra: Historia General de España, parte 3ª., libro 10 capítulo 30, dice: ’Es común error pensar que la dificultad de escribir la historia contemporánea esté solamente en no poder confiar en la imparcialidad y desapasionamiento del que haya de escribirla…No; la dificultad no suele estar en el historiador, sino en los lectores mismos, que son muchos, y que sin aquellos deberes, son aquellos compromisos de interés y de honra, sin aquel estudio, sin aquel trabajo de investigación, si aquel cotejo de datos, sin aquella frialdad que sólo se siente en las alturas desde las cuales hay que abarcarlo y denominarlo todo.

*SECRETARIO GENERAL DEL CLUB PRIMERA PLANA Y VICEPRESIDENTE DE LA SOCIEDAD MEXICANA DE GEOGRAFÍA Y ESTADÍSTICA.