Machismo y erotismo

Cualquier día el erotismo y el machismo nos van a sorprender tanto, que los hombres no van a saber dónde meterse después… Mucus, después de años de observación mocosa, nos aproxima a dicho suceso avisándonos:

Mientras la “culturO” decida a quién hay que erotizar, cómo, cuánto y para qué, lo que tiene que ver “naturalmente con su machodeseo”, ¡todo irá bien!

Otra cosa será lo que se salga del llamado sentido común, que no es otra cosa que su “machosentido”.

Para lo que no concuerde con ese su común sentido, tiene preparada y a su disposición toda su profunda teoría filosófica y psicológica de la afectividad, la sexualidad y la reciprocidad. La cual, le ha costado un reflexivo pensamiento que ha venido desarrollando a lo largo de los siglos: la mujer cuando se sale del consenso cuadriculado del macho, es fulana o ninfómana, quedando todo justificado en sus esquemas de “prudente fratría” .

Mucus esputa:

Ustedes los hombres machistas, posmachistas… no se crean que la dan con queso, una cosa es la forma de vestir de las mujeres en la “culturO” mediatizada por el deseo del hombre, otra, el abuso del hombre a través de su deseo, justificándose por la provocación en la forma de vestir de las mujeres, siendo parte y juez, brillando la ecuanimidad por su ausencia.
Las necesidades sexuales humanas no son patrimonio exclusivo de los hombres, y la satisfacción de las mismas tampoco.
Las mujeres tienen un propio deseo sexual, ¡y esto, ciertamente es por naturaleza!
Y las comparaciones generan siempre muy buen humor y mucha risa… aprendan de su “machocuento”.